viernes, 7 de octubre de 2011

El visitante nocturno Cap 3

Capitulo 3

Segundo encuentro


El domingo estuve más distraída que nunca, mi padre tuvo que decirme la mayoría de las cosas dos veces para que le prestara atención. Él creyó que era porque me había dormido tarde la noche anterior, pero la verdad era que mi concentración estaba puesta en mis confusos recuerdos sobre aquel vivido sueño. Sentía que estaba olvidando detalles sobre el sobrenatural encuentro, así que a cada minuto trataba de repasar los sucesos como en una película, pero estaban tan mezclados, que ni yo sabía bien el orden real.


Debido a mi descuido olvidé agregar el suavizante a la ropa que se estaba lavando y cuando la saqué de la lavadora estaba increíblemente rígida. Mi padre se rió un buen rato por mi percance, y luego de ver mi mala cara dijo que no le importaba usar su ropa así.


Después de cenar el estofado que hice por su victoria en el pocker, me fui a mi pieza más que agotada, me recosté en la cama mirando el techo con las manos apoyadas en mi frente y una pierna colgando hasta el suelo. Necesitaba tener contacto con el piso, sentía que si no lo hacía saldría volando. Me encontraba tan confundida entre la fantasía y la realidad, sentía que había un gran detalle que estaba olvidando, algo importante. Pero por más que me estrujé el cerebro no pude recordar aquello que era, según yo, tan importante. Malditas lagunas mentales.


En clases no me fue mucho mejor que en mi casa, estaba distraída y no ponía atención a mis profesores, dos veces me encontraron con la guardia baja al hacerme una pregunta. Casi quemé a mi compañero de laboratorio en un experimento con ácidos y bases, por suerte mi profesora me avisó antes de que dejara algún herido. Golpeé a la mayoría de mi equipo en la clase de deportes y se me cayó la botella de refresco en el almuerzo. En resumen, mi día fue un asco.


- Bella, ¿estás bien?- me preguntó Ángela- te ves agotadísima.

- No he dormido muy bien estos días, pero no es nada- dije sonriendo para tranquilizarla.

- Pues ese “nada” te está afectando bastante- dijo Jessica examinando mi rostro.

- Jessica, no seas pesada- intervino Ángela.

- Pero si lo digo en serio, te ves como un zombi, si no duermes algo en poco tiempo te parecerás a Frankenstein- me dijo con cara de preocupación.

- Jessica, sí sabes que en realidad ese es el nombre del científico y no del monstruo ¿verdad?- dijo Ángela divertida.

- ¿Qué has dicho? - pregunté completamente exaltada.

- ¿Es que tú no lo sabías? - preguntó sorprendida Ángela- creí que amabas ese libro.

- ¡Eso era! - dije sonriendo aliviada. Al fin había recordado lo que había estado buscando en mi desorientada mente, la pista que distraídamente había olvidado.

- ¿Qué cosa?- preguntaron al mismo tiempo.

- Lo siento chicas, debo irme, olvidé que tenía este compromiso muy importante- dije corriendo hacia mi anticuado automóvil que esperaba en el aparcamiento- ¡nos vemos mañana! - grité antes de perder de vista sus rostros pasmados.


Apenas llegué del colegio, corrí escaleras arriba con una sola cosa en mente, mi libro. Mi desgastada edición de Frankenstein que debería estar en mi estante para comprobarme que todo esto no había sido más que una extraña pesadilla. Abrí la puerta de un golpe y me arrodillé frente al librero buscando desesperadamente con la mirada todos los ejemplares que había allí. Luego, traté de calmarme y empecé a leer los títulos, uno por uno, igual como lo había hecho aquella noche, pero sólo luego de leer todos por 2 veces, me convencí de que no estaba.

Entonces di vuelta mi cuarto entero buscando en cada rincón, dentro de todos los cajones o bolsos donde pudiera haberlo dejado distraídamente, mientras comenzaba a hiperventilar conciente de que, al menos una parte de mi sueño, había sido real.

Pero ¿qué significaba eso? ¿Realmente hubo un vampiro en mi habitación o el libro había sido robado por un ladrón y yo había mezclado las cosas? Mi paranoia se adueñó de mí y mis nervios estaban a flor de piel. Cada dos segundos miraba sobre mi hombro o atrás de las puertas. ¿Qué iba a hacer si el chico de mi sueño era real? ¿Qué pasaría si volvía?


Repasé las opciones, si en realidad todo era un sueño, no tenía nada de qué preocuparme, jamás lo vería de nuevo, nunca mas vería su rostro, sus hipnóticos ojos, no escucharía su voz tan atrayente, no vería su sonrisa…Tuve que para de pensar en esa opción porque ya estaba desvariando. Por otro lado, si era real, y todo lo creí haber soñado en realidad había pasado, lo más probable es que él volviera en algún momento. Lo que significaba que lo tendría frente a mí de nuevo para hacerle todas las preguntas que tenía en mente. Y aunque la idea de estar con un vampiro me aterraba, también sentí otra extraña sensación recorriendo mi cuerpo, ansias, emoción. Me emocionaba volverlo a ver.


Luego de esa resolución, los días mejoraron de una extraña manera, ya no estaba tan distraída, pero estaba impaciente porque llegara el fin de semana. Las ansias también potenciaron mi torpeza, pero al menos, no tanto como cuando estaba distraída.

Finalmente llegó el esperado viernes, y con el también llegaron los nervios. Llegué después del trabajo a la casa, dejé el bolso en la salita y fui a la cocina para ver qué podía cocinar para la cena, cuando sonó el teléfono. Contesté casi esperando que fuera el vampiro, lo que era realmente ridículo.


- ¡Bella!

- Hola Jake, ¿cómo estás?

- Muy bien ¿y tú?

- Algo cansada por el instituto, pero al fin es fin de semana- dije sonriendo.

- Oye Bells, los chicos de la reservación van a hacer una fiesta, ¿quieres venir? será genial. Nos juntaremos en la casa de Jared, haremos una gran fogata…

- ¿En La Push? Cielos, Jake me encantaría- dije sintiéndome enormemente culpable- pero la vedad es que estoy muy cansada.

- Vamos, no seas aburrida, vas a envejecer si no te diviertes- dijo bromeando, aunque pude notar que mi respuesta lo desanimó bastante.

- Es que acabo de llegar del trabajo, ya sabes que voy tres veces por semana, estoy exhausta y aun tengo que hacer la cena para Charlie.

- Yo había pensado que podías venirte con Charlie, ya que él va a jugar poker con Harry y mi papá, y podían cenar acá, si quieres.

- Oh Jacob, en serio agradezco tu invitación, pero no creo que pueda mantenerme despierta y sólo voy a arruinarte la fiesta, mejor nos vemos mañana como siempre, iremos a almorzar allá- dije mordiéndome el labio con remordimiento.

- De acuerdo, nos vemos mañana entonces- dijo.

- Espero que lo pases genial en tu fiesta, mañana me cuentas cómo te fue- dije tratando de animarlo.

- Está bien, pero la próxima vez no puedes negarte- dijo más animado

- Bien, es una promesa- dije no muy segura.

- Que duermas bien Bella.

- Dale saludos a Billy- dije antes de cortar.


Si el vampiro no aparecía me odiaría por haber plantado a Jacob, además de que tendría que quedarme otro viernes aburrida por culpa de mi extraña obsesión. Terminé la cena justo cuando sentí el auto de Charlie estacionarse. Conforme pasaban los minutos, mi nerviosismo fue creciendo haciéndome imposible tragar otro bocado de la cena, tampoco hablé mucho, solo asentía a lo que mi padre me contaba.


- ¿Entonces te quedas acá? – preguntó mientras bajaba las escaleras.

- Si, pienso acostarme temprano- mentí.

- Pero oí que los chicos tendrán una fiesta, se oía divertido.

Levanté una ceja con burla.

- Bien, bien, sé que no soy el mejor para juzgar la diversión para adolescentes, pero no deberías quedarte en casa un viernes por la noche.

- La verdad es que estoy demasiado cansada para fiestas- dije bostezando.

- Bella, te exiges demasiado- dijo mi padre- deberías dejar de cocinar todos los días, podríamos ir a comer a fuera, o donde Billy.

- No, me gusta cocinar, además ya vamos donde Billy todos los sábados, no quiero abusar de su hospitalidad.

- Vamos Bella, es Billy, somos familia.

- No me harás cambiar de opinión- dije segura.

- Bella, eres tan obstinada- dijo dando un suspiro, pero luego me sonrió- sólo no hagas un fiesta mientras yo no estoy- agregó guiñándome un ojo antes de salir de la casa.


Una vez que mi padre se fue a La Push y ya no era necesario aparentar frente a alguien, mis nervios se manifestaron en todo su esplendor. Mis manos estaban sudadas y tenía un nudo en el estomago.

Si el bendito vampiro aparecía, confirmaría mis teorías, pero si no, tendría que conformarme con su recuerdo, tendría que acostumbrarme a la idea de que su rostro de bellas facciones no eras más que el producto de mi imaginación.

Subí y baje las escaleras al menos unas 10 veces sin saber bien hacia donde quería ir en realidad, prendía y apagaba luces sin sentido. Encendí la televisión por un par de minutos sin ponerle atención a lo que estaban dando. Perdí la cuenta de cuantas veces me asomé por la ventana y busqué entre los árboles alguna presencia humana, o no humana.


Cerca de las 11:00 de la noche me senté en la cama de mi pieza con la luz encendida, cuando escuché lo que había estado esperando toda la última hora, la última semana en realidad. Un golpeteo en la ventana.

Miré de inmediato con el corazón martillando fuertemente en mi pecho, ahí estaba él, acuclillado en el borde de mi ventana mirándome fijamente.

5 comentarios:

  1. ahg,no se vale.
    me dejaste con ganas de mas!
    espero el suguiente he,sabes que me encanta la historia.

    ResponderEliminar
  2. Luniita, me encanta esta historiaa pero publica mas seguiiidoo!

    ResponderEliminar
  3. Hola linda!! amiga gracias por avisarme sabes que adoro tus fics y si no me paso es porque ando a mil pero aquí estoy poniéndome al día!!!
    Un capoitulo lleno de nervios, dudas, inquietudes y sobre todo lleno de intriga ya me la imagino a Bella entrando y saliendo buscando hasta debajo de la cama de veras fue muy divertido lo disfrute mucho. Como siempre cada ves me das y mas así que sigo leyenda amiga bye!!♥

    ResponderEliminar
  4. De verdad, Bella se está volviendo loca! aunque, bueno, creo que yo hubiera hecho lo mismo :P El primer "sueño" no fue sueño, aunque seguramente el segundo sí. ¿Que no Bella debería ser vampira ya si de verdad la hubiera mordido?¿Y por qué Edward no puede ser un vampiro "bueno"? :(

    ResponderEliminar
  5. Oye, por si no te habías fijado, el título dice "SEgundo encuentro". Ya se que a lo mejor es un error ortográfico, pero si te fijas es un buen juego de palabras; justo la segunda letra está en mayúsculas como la primera.

    Bueno, solo es una observación jajaja!
    XD

    K&B!

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...